Si tienes las herramientas necesarias no tiene mayor complicación.
Si te fijas en el frontal, verás que hay cuatro agujeros en las esquinas. En esos agujeros hay que meter una herramienta en forma de U: una a cada lado y tirar hacia el exterior.
Una vez fuera se quitan las conexiones y listo.
Si no dispones de las herramientas puedes intentarlo con un alambre doblado, pero debe ser exactamente del diámetro adecuado.