Un buen equilibrado en tu mecánico de confianza es la solución definitiva para eliminar las vibraciones.
Si bien el 307 es sensible a las vibraciones en el eje delantero, se ha comprobado como despues de un buen equilibrado estas desaparecen en su totalidad.
De todas formas, puedes probar con este procedimiento por si te funciona.
Desde los primeros modelos, el 307 se ha mostrado como un coche sensible a las vibraciones en el eje delantero. No todas las unidades las han sufrido, si bien, la gran mayoría padecen de ellas.
En otros casos, estas vibraciones, se han empezado a producir después del primer cambio de ruedas del eje delantero, o después de unos cuantos Kms.
Las vibraciones, aparecen en el margen de velocidades de 110 a 130 km/h y de manera irregular: a veces en un mismo tramo de carretera se dan y otras veces no; a veces son más fuertes y otras veces casi ni se perciben.
La única solución que parece efectiva hasta la fecha, es un buen equilibrado de las ruedas delanteras, llegando incluso a realizar en varios casos numerosos equilibrados hasta encontrar el momento en que no se producen, o realizando dicho equilibrado con las últimas tecnologías y sistemas de "equilibrado estático" (con la rueda en el vehículo).
Cualquier otra alternativa no parece factible, como puede ser el apriete y ajuste de la cremallera de dirección (que en ningún caso ha solucionado el problema) o el cambio de elementos de la estructura del eje delantero.
Parece ser más un problema de diseño del coche que otra cosa, y recordad que en garantía Peugeot debe hacerse cargo de esta circunstancia.
Sin embargo, en el Club Italiano nos hemos encontrado con casos que han solucionado el problema siguiendo el procedimiento que os mostramos a continuación. Os recomendamos que lo probeis a ver si funciona.
RECETA PARA ELIMINAR LAS VIBRACIONES
Para empezar es necesario contar con los siguientes ingredientes:
1. Buscarse 4 ruedas de aluminio o acero con ruedas infladas a la presión aconsejada por la casa y equilibradas con precisión.
2. Un Peugeot 307 berlina, CC, SW o Station con la dirección y las suspensiones en buen estado (nada dañado por baches o por otros impactos).
3. Una llave cruzada del 19 específica para tuercas de rueda. Esta deberá tener unos 35 centímetros de longitud en cada brazo.
Proceder entonces con la preparación:
1. Fijar las ruedas una por una, o si ya las tenemos montadas (que es lo más probable), desmontarlas para volverlas a montar una por una, asegurándonos que cuando se apriete la rueda ésta esté levantada del suelo.
2. Antes de posicionar la rueda sobre la parte central del elemento rotante, hay que prestar la máxima atención en que las superficies estén limpias.
3. Al usar el perno de centrado del coche hay que procurar que el espacio entre este y el hueco de la rueda esté distribuido equitativamente por toda la circunferencia (esto es fundamental en las ruedas de aluminio).
4. Apretaremos una sola tuerca y verificaremos que la distribución del espacio anterior sigue igual.
5. Para apretar usaremos la llave en forma de cruz y usaremos toda nuestra fuerza (a menos que seamos el increíble Hulk, caso en el que sería recomendable moderarse un poco). Haciendo así obtendremos aproximadamente un par de apriete de 11 kg. Hay que apretar los tornillos cruzando el orden (es decir, no en sentido horario ni antihorario, sino 1,3,4,2 ó 1,3,2,4). Luego daremos más pasadas.
6. Repetimos los siguientes pasos con rigor en cada rueda
Ahora podemos pasar a probar el resultado, si las vibraciones persisten y ni siquiera han disminuido es que los ingredientes no están a la altura.
Se puede probar también a cambiar la convergencia de las ruedas de -1mm (configuración de fábrica) a 0 Mm. (ruedas paralelas), valores entendidos para cada rueda. Si hacemos esto hay que controlar el desgaste de los neumáticos, pues quizá de ese modo sea irregular.
Bien, probad y ved si lográis cocinar un buen plato…
¡Suerte!
Texto extraído del Club Italiano
Traducción de Joaquín Moya.